El espectador informado se dará cuenta de que la ciudad colonial es un lugar temporal. La ciudad se construye como las llegadas de las poblaciones cada uno trayendo su ambiente. Ella cree que es metrópolis.
Incluso antes de la era moderna en Europa, la ciudad desborda las fronteras continentales. Después de Fernand de Magallanes y los grandes descubrimientos, la influencia de Europa cambia de escala. Los contadores viven al ritmo de los barcos procedentes de Sevilla o de Lisboa, Amberes, Londres o Hamburgo… Europa exporta diferentes modelos metropolitanos.
Para la ilustración, en 1498 en Santo Domingo, seis años después del descubrimiento de la isla por Cristóbal Colón, surgió la primera catedral, el primer hospital, la primera aduana y la primera Universidad de América. La ciudad colonial fue construida de acuerdo a un plan de tablero de ajedrez que sirvió como modelo para casi todos los urbanistas en el nuevo mundo. La ciudad de Santo Domingo fue el punto de partida para la influencia cultural europea y la conquista del continente americano.
Con el siglo XIX, la ciudad colonial se movía hacia nuevos modelos. La búsqueda de la modernidad, la expresión política y las nuevas necesidades involucran la experiencia local. La ciudad se transforma entre la persistencia, la extensión del modelo heredado y las opciones innovadoras hechas después de la transición de la colonización a la independencia.
La circulación de ideas y hombres se revierte entre Europa y el resto del mundo.
Esta sección corresponde a los viajes fuera de las fronteras. En veinte líneas, un artículo general permitirá al lector descubrir una ciudad colonial y descubrir lo que podría descubrirlo.
La única regla será vincular las regiones, los países de ultramar y los países antes colonizados tanto en el continente americano como en África y Asia e ilustrar el tema con una película de 1 minuto y treinta segundos como máximo, de fotografía. Cada año un concurso se llevará a cabo con los suscriptores, premiar el mejor tema en cada uno de los títulos de la “ciudad colonial” y el ganador o ganador recibirá una ganancia relacionada con el viaje.

Cuentos de antaño es un programa a corto plazo que cruza el nombre, la palabra, el turismo y la historia regional y Europea.

Este programa permite educar, entender los caminos de las palabras y los nombres. Estas trayectorias indican orígenes, memorias que afectarán al turismo y vincularán a las regiones, los países de ultramar y los países anteriormente colonizados tanto en el continente americano como en África y Asia.

 

En el nombre, en la palabra, el turismo ata la cocina. Bacon y miel es un programa audiovisual a corto plazo que muestra una cocina que cruza un plato o un ingrediente culinario de una región y que habrá influido en la gastronomía o el paisaje de regiones, países de ultramar y países anteriormente colonizados tanto en el Continente americano que africano y asiático.

El plato o ingrediente será explicado y demostrado por un restaurador local que utiliza tanto los sabores regionales y los países antes colonizados y el extranjero para su cocina.

Esta sección corresponde a viajes fuera y dentro de las fronteras. En veinte líneas, un artículo general permitirá al lector descubrir una receta para descubrir sus fuentes y su entorno.

La única regla será vincular las regiones, los países de ultramar y los países antes colonizados tanto en el continente americano como en África y Asia e ilustrar el tema con una película de 1 minuto y treinta segundos como máximo, de fotografía. Cada año se realizará un concurso con los suscriptores, premiará el mejor tema en cada uno de los títulos de “bacon y miel” y el ganador recibirá una ganancia relacionada con el viaje o la cocina.